Dolor….eso es lo que se siente al encender la radio o al ver las noticias….tristeza, impotencia y rabia al darse cuenta del interminable odio que los grandes medios siembran en nuestra nación. Ninguno parece salvarse, El Tiempo, Prisa, Caracol y principalmente RCN radio y televisión se han encargado de sembrar odios, pasiones exacerbadas e ira entre los colombianos. Es claro que no podemos hablar de una polarizacion, al contrario, la manipulación mediática ha propiciado un escenario donde las masas son uniformes y dan su grito unisonoro a la voz de unas pocas presentadores que mas allá de leer un telepromter no parecen analizar ni verificar la información. Hoy vemos en Piedad Córdoba una mujer polémica, las amenazas nunca han sido nuevas en la vida de la senadora, basta recordar los sucesos que han rodeado a su familia y a quienes la acompañan para saber que si algo tiene claro la elite colombiana es que a personas como “la negra”, titulo que le dan sus amigos y enemigos, no se le deben brindar espacios democráticos para defender sus ideas. No obstante, es lamentable el espectáculo que los medios han brindado en los últimos días, todos los medios, pero en especial RCN radio y televisión se han colocado en una posición absurda.
Para quienes saben de Ciencias Sociales es obvio que la neutralidad y la objetividad son los mayores principios de la labor periodística pero al mismo tiempo son la mayor falacia de dicho ejercicio. Las mencionadas características son solo un imaginario, una meta, un sueño donde todo periodista quisiera llegar. Es claro entonces que cada medio persigue sus propios fines, con una ideología propia y con métodos para tal fin. Sabemos que en Colombia los medios de comunicación, a excepción de contados ejemplos, no son muestra de independencia, al contrario, podemos constatar que cada uno de estos medios pertenece a un gran conglomerado económico que tiene entre sus negocios al ejercicio periodístico. Poco importa la verdad si no hay ganancia. Muchos de estos medios pertenecen a grupos económicos acusados de financiar el genocidio paramilitar…tal vez por eso mientras proponen un millón de voces contra las FARC se aseguran de silenciar la voz de la verdad paramilitar….
La marcha del 4 de febrero marco un hito en la historia colombiana pues tal vez es la mayor realizada en toda nuestra historia, ni la muerte de lideres como Luís Carlos Galán, Jaime Pardo, Álvaro Gómez o tragedias como el terremoto de Armenia o el desplazamiento de miles de colombianos habían provocado tal movilización…Una marcha que mas allá de pedir por la paz mostraba como el colombiano del común vive lleno de odio, odio que al parecer supo ser utilizado por los grandes medios quienes utilizaron como mimos y malos actores a un pequeño grupo de jóvenes que hoy, orgullosos, se sienten como los únicos capaces de convocar a millones de colombianos a las calles. Es infame decir que fue una iniciativa surgida de facebook, al contrario, sin lugar a dudas dicha marcha no hubiera podido darse sin el oportunismo, el apoyo, el amarillismo y la financiación que los grandes medios y los gremios colombianos brindaron para tal fin.
Mi fin no es avalar o rechazar la marcha, ya quisiera yo que cada colombiano tuviera un mínimo de condiciones para poder evaluar por si mismo la “exitosa” jornada del 4, pero es claro que eso se lograra el día en que se diversifiquen no solo la opinión, sino las miradas, las tendencias y las versiones sobre la realidad social de nuestro país, es decir, cuando se democraticen los medios de comunicación.
Es realmente triste ver como RCN, Caracol y El Tiempo manipulan no solo la información sino la inocencia misma de un pueblo cansado de la violencia. La pena de muerte impuesta desde la sala de redacción de RCN contra Piedad Córdoba no puede ser una señal en un país que supuestamente busca caminos no violentos para una solución a sus problemas sociales, políticos y económicos. El 4 de febrero vimos una multiplicidad de expresiones, pero en las pantallas de nuestro televisor solo veíamos una voz…la voz que pedía violencia, venganza, la voz que omitía el crimen paramilitar pero resaltaba el crimen subversivo, ese día vimos miles de pancartas pero en canales como RCN solo vimos pancartas que ni siquiera iban en contra de la guerrilla de las FARC, sino pancartas que lanzaban improperios contra lideres que no estaban de acuerdos con las políticas del actual gobierno, tal es el caso de Piedad Córdoba, quien a decir verdad fue victima de miles de insultos en las calles ese día.
Puede uno estar o no de acuerdo con la posición de la senadora, incluso la del mismo presidente Chávez, pero lo que no pueden hacer los señores Álvaro García, Vicky Dávila, Julio Sánchez, Claudia Gurissati y Rafael Nieto entre otros, es lanzar al linchamiento publico a una mujer de la cual el único delito que se le puede adjudicar es no estar de acuerdo con las posiciones de los medios de comunicación.
Es claro que la popularidad de Álvaro Uribe no depende simplemente de sus carnitas y huesitos, como tal vez el lo dirá. Sin duda alguna el manejo dado por los medios implica una consonancia con lo planteado desde
Me pregunto yo, que no soy un gran columnista, que no tengo voz ni voto en partido político o sala de redacción alguna, que sentirán estos periodistas el día que lamentablemente asesinen a Piedad Córdoba, porque sin ambigüedades lo que buscan estos medios es eso.
Acaso, no ser de derecha, no ver la violencia desde una mirada simplista y guerrerista, seguir los ideales de un presidente que a la elite colombiana disgusta, es un razón valida para llamar a la violencia contra Piedad? Basta ver donde estaría el tema del Acuerdo Humanitario si no fuera por Chávez y Piedad quienes no solo le recordaron a Colombia que habían compatriotas muriéndose en la selva, sino que además se lo informaron al mundo?
Contrasta el trato recibido por Piedad y el llamado a la violencia contra ella frente al trato dado a los parapolitcos, basta ver como en la cosa política, en código secreto y en el 1,2,3 de Claudia Hoyos, estos temas son tratados con cierta picardía. Basta ver además a Julito, a Claudia y a Félix lamentarse porque el profesor Jean Batou no catalogaba como terroristas alas FARC mientras guardan silencio frente a un Estado paramilitar, basta escuchar a Vicky Dávila y Rafael Nieto burlarse de la diputada venezolana Iris Varela después de ser entrevistada por ellos mismos, el silencio de Darío Arismendi ante las bravuconadas de Uribe en directo o el cinismo de Juan Gosain al lamentarse por supuestas amenazas contra su vida….solo basta ser testigo del silencio de los grandes medios frente a las amenazas contra Fredy Muñoz, Hollman Morris, Daniel Coronell, Gonzalo Guillen entre otros para darse cuenta de la credibilidad que ustedes tiene a la hora de hablar sobre libertad de prensa
Claro señores, en Colombia existe un grave problema de terrorismo, el cual no es alentado precisamente por Uribe, ni por Marulanda, ni por Mancuso sino desde las salas de redacción, desde los telepromter, desde los micrófonos y demás herramientas que Uds. usan de forma irresponsable y maniqueístas para velar por los interese de sus jefes y los suyos propios.
Colombia fue, a decir verdad, el país que mas se escandalizo con la medida chavista en contra de Rctv. No hubo periodista de un gran medio que no censurara tal actuación pues para ustedes esto violaba la libertad de expresión. Es hay cuando me pregunto con que cara pueden ustedes hablar de esto si en Colombia no hay libertad de información y mucho menos de expresión. En este país solo existe una visión de la realidad, en este país nos toca limitarnos a escuchar y aceptar como cierto lo que ustedes piensan, a emocionarnos con el nacionalismo barato que ustedes impulsan y a ser tan inocentes de creer que el mayor problema del país es la insurgencia.
A ese 20% que Gallup o Napoleón Franco señalan como el porcentaje de colombianos que no nos hemos dejado convencer por ustedes no nos queda otro camino que esperar a que el sol vuelva a aparecer, a que surja un mejor mañana donde otra Colombia sea posible. Me niego a creer que en Colombia solo se pueda participar con armas, me niego a aceptar el destino que ustedes nos marcan. Mal hace el Polo al hacerle oposición a Uribe pues este caerá cuando ustedes lo decidan y de seguro llegara otro al cual ustedes estilizaran y mostraran como Mesías…abran además muchas mas personas a quien mostrar como apartidas, ya sea que no exista una Unión Patriótica o que se asesine a una Piedad Córdoba, ustedes siempre encontraran otro opositor a quien lanzar al purgatorio publico y hacerlo pagar por tener una visión diferente de país….a un “apatrida” de turno.